Exodos 14: 15 - 16
Entonces Jehová dijo a Moisés:
¿Por qué clamas a mí?
Di a los hijos de Israel que marchen.
Y tú alza tu vara,
y extiende tu mano sobre el mar,
y divídelo;
y entren los hijos de Israel
por medio del mar en seco.
Levitico 9: 22 (a)
Entonces Aarón,
alzando las manos hacia el pueblo,
lo bendijo.
Marcos 6:5
Y no pudo hacer allí ningún milagro;
sólo sanó a unos pocos enfermos
sobre los cuales puso sus manos.
Marcos 16: 17 - 18
Y estas señales seguirán a los que creen:
En mi nombre echarán fuera demonios;
hablarán nuevas lenguas;
tomarán serpientes;
y si bebieren cosa mortífera,
no les dañará;
sobre los enfermos pondrán sus manos
y sanarán.
Hechos 3: 6 - 7
Y Pedro le dijo: No tengo plata ni oro;
mas lo que tengo te doy:
En el nombre de Jesucristo de Nazaret,
levántate y anda.
Y tomándole por la mano derecha le levantó;
y al instante fueron afirmados sus pies y tobillos;
Hechos 6: 1 - 6
Y
en aquellos días,
multiplicándose el número de los discípulos,
hubo
murmuración de los griegos contra los hebreos,
de que sus viudas eran
desatendidas
en el ministerio cotidiano.
Entonces
los doce convocaron
a la multitud de los discípulos, y dijeron:
No es
justo que nosotros dejemos la palabra de Dios,
para servir a las mesas.
Buscad,
pues, hermanos, de entre vosotros
a siete varones de buen testimonio,
llenos del Espíritu Santo y de sabiduría,
a quienes pongamos sobre este
trabajo.
Y nosotros persistiremos en la oración,
y en el ministerio de la palabra.
Y
lo dicho agradó a toda la multitud;
y eligieron a Esteban,
varón lleno
de fe y del Espíritu Santo,
y a Felipe, y a Prócoro, y a Nicanor,
y a
Timón, y a Parmenas,
y a Nicolás, un prosélito de Antioquía.
A éstos presentaron delante de los apóstoles,
quienes orando,
les impusieron las manos.
Hechos 9: 12
y ha visto en visión a un varón llamado Ananías,
que entra y pone sus manos sobre él,
para que recobre la vista.
Hechos 9: 17
Ananías fue y entró en la casa,
y después de poner las manos sobre él,
dijo:
Hermano Saulo, el Señor Jesús,
que se te apareció en el camino por
donde venías,
me ha enviado para que recobres la vista
y seas lleno del
Espíritu Santo.
Hechos 13: 3
Y habiendo ayunado y orado,
les impusieron las manos, y los enviaron.
Hechos 28 : 8
Y aconteció que el padre de Publio estaba en cama,
enfermo de fiebre y de disentería;
al cual Pablo entró a ver,
y después de haber orado,
puso sobre él las manos,
y le sanó.
Lucas 24: 50
Los sacó hasta cerca de Betania y,
alzando sus manos, los bendijo.
Santiago 5:14
¿Está alguno entre vosotros enfermo?
Que llame a los ancianos de la
iglesia
y que ellos oren por él,
ungiéndolo con aceite en el nombre del
Señor;